¿PARA QUÉ EL PROCESO INVESTIGATIVO REALIZADO POR HILARIÓN, SISEDÓN Y J.R.L.ÁLVAREZ EN CONJUNTO?.
En este tercer acercamiento posaremos nuestra mirada sobre
un interrogante que si el lector no se lo ha hecho, al menos debería
considerarlo. Este se basa en el hecho de que la Obra ha sido por un lado
psicografiada dentro de un mecanismo delicado a través de las dimensiones,
mientras que por otro, también se ha valido de un proceso investigativo, tanto
a nivel físico como astral. Ambas cosas no son del todo compatibles a primera
vista. Si uno dice que la información que se extrajo fue, nada más ni nada
menos que de los archivos de la luz, entonces ¿para qué sería necesaria una investigación?
¿Acaso no basta con haber alcanzado una verdad reservada a pocos dentro del
archivo incorruptible que tiene el universo?
Dentro de este marco de planteamiento que estamos
dilucidando, se encuentra entretejido como vil rapaz, el prejuicio de la
mayoría de los que se han adueñado de la obra, y que proclaman a viva voz un
escenario totalmente alejado de la realidad, cuando instan a creer a los
lectores en una psicografia alejada de problemáticas, exenta de riesgos y, por
lo tanto, salvada de errores. Si acaso juzgasen, solo por un momento, la tamaña
contradicción que puede observarse a vuelo de pájaro, entre ambos procesos, uno
terrenal, otro celestial, no dudarían en tener una actitud más prudente y menos
fantástica de los verdaderos hechos.
Sin embargo, estos fanáticos, no entienden de términos
medios. Exacerban la canalización lograda con ayuda de los registros akashicos
al mismo tiempo que ignoran o menosprecian
el trabajo de investigación que la misma médium y los propios autores han
realizado. Como se podrá ver, en la imagen que mostramos, (que es de la
segunda hoja del libro) las antiguas ediciones colocaban el listado de los
autores antiguos y modernos consultados para comprobación de la obra. Hoy, en
las nuevas ediciones, este listado ha sido suprimido.
Pero vayamos al punto principal, y dejémosles a aquellos que
no entiendan sus propias fantasías. La
investigación que los autores han realizado se centra en documentación que fue
salvada de la proscripción del emperador Diocleciano en el siglo primero.
Diocleciano era un emperador totalmente militar, y en ese entonces había
repartido su reino con Maximiano, Constancio y Galerio a los que les había dado
cierto poder para manejar el vasto imperio.
Este imperio absolutista, es conocido en la Historia por la
gran persecución que realizo a los cristianos y Maniqueos de ese entonces. Según Eusebio de Cesárea, no
fue directamente Dioclesiano quien mando la persecución sobre los cristianos,
sino Galerio quien veía en ellas una ventaja política.
Sea como fuere, lo cierto es que dentro de lo que fue la
persecución, hubo sin duda, una fuerte expropiación de documentos y papiros de
gran antigüedad, tal como ha sucedido con la Iglesia de Nicomedia, la cual fue
arrasada y saqueada por orden de Diocleciano .
De lo que ha podido ser salvado, ya que la persecución llego
a límites insospechados cuando se firmó el “edicto
contra los Cristianos” y se decidió quemar todas sus escrituras, Sisedón de
Trohade e Hilarión del Monte Nebo recopilaron para comprobación de sus
canalizaciones, toda la información que pudieron y la contrastaron con aquello
que habían recibido.
Además de esta documentación, también sabemos por lo que nos
comenta Hilarión, que de los archivos Esenios de Moab y del Libano y de las
tres escuelas de sabiduría del oriente, se ha podido recabar información importante que refleja la
personalidad del Cristo en el paso por nuestro planeta.
Seguramente y a esta altura, el lector se preguntará cómo
puede un muerto recabar información dentro del planeta. Bueno, primeramente no
es un muerto sino un espíritu en estado libre. Véase el libro de Oro de Saint Germain
y podrá observarse como éste le muestra a otra persona, en estado eterico,
ciudades que vivieron en otros tiempos, que quedaron guardadas en el éter
lumínico de ese entonces. Pero si bien
esta comparación es importante, no es precisa, porque Hilarión y Sisedón no se
valieron del éter lumínico sino del akasha, el cual es una fuente más fiable, y
además, no lo hicieron por ellos mismos, esto se aclarará en otra aproximación
a la Investigación cuando se estudie el proceso psicografico. Lo que los
intermediarios, Hilarión y Sisedón han hecho, es observar, en estado libre,
algunos papiros y documentos que mostraban y confirmaban la historia de este
planeta. Debemos suponer que en el planeta existen muchos lugares que han
podido resguardar de las guerras y la barbarie, los documentos que trasmiten la
historia verdadera y no falseada por los seres humanos.
Vayamos ahora a la consideración psicológica de este asunto.
Un sensitivo, como canal que es, no puede pretender la verdad absoluta de sus
intuiciones, no puede fiarse ciegamente en aquello que ha percibido,
simplemente porque la percepción tiene una limitación.
Según la calidad del médium, es la calidad de lo percibido,
pero ninguno está exento de la subjetivación del mensaje recibido, y esto es
porque dentro del cerebro existen atavismos psíquicos que codifican las
imágenes según los códigos arquetípicos que cada ser haya llegado a poseer.
Dada entonces, la
intensa subjetividad de cada “yo” un mismo acontecimiento puede ser percibido
de diferentes formas, tantas como cantidad de observadores exista. Por lo
tanto, el trabajo investigativo, resguarda al sensitivo de la observación
subjetiva. Lo mismo sucederá con el intermediario (Sisedón o Hilarión), ellos,
como veremos en el próximo acercamiento, son canales de otra individualidad
mayor y también reciben la información con cierta subjetividad.
Dadas estas circunstancias, el trabajo de canalización es un
arte complejo en donde se prueban las objetividades tanto morales como
intelectuales de cada Ser que intervenga.
Esto último que he mencionado, se deberá recordar a la hora
de calificar cualquier trabajo con ánimos de perfección. Y nos servirá además
para avalar la presentación de casos de error que en la Obra se producen.