Comprobaciones del Laberinto narrado en Cumbres y Llanuras.
En Febrero del año 2008 se realizó una expedición en Hawara, Egipto para escanear con un geo-radar la zona donde supuestamente se encuentra el Laberinto. Lo que encontraron prueba que la canalización hecha por Josefa Rosalía Luque Álvarez en el libro Cumbres y Llanuras dictado por Hilarión de Monte Nebo, referente al laberinto encontrado debajo del templo del Lago Merik era cierta.
Fotos recientes tomadas de la expedición Mataha donde muestran restos del celebre laberinto
Versión animada del Laberinto
EL LABERINTO ESTABA AL LADO DEL CEMENTERIO
“Todo un día les ocupó el recoger de las más profundas
criptas los esqueletos de los condenados a muerte por las antiguas leyes del
Templo, y llevarlos al humilde cementerio de los esclavos, donde los sepultaron
entre los áloes gigantescos y el brillante cañaveral rumoroso. En esta limpieza general de criptas y cámaras
descubrieron la entrada a un enorme túnel que se perdía a lo lejos y que tenía
numerosos cruces de caminos subterráneos que bajaban más hondo, hasta llegar a
comprender que aquellos sombríos corredores pasaban por debajo del lago” {1}
COMPROBACIÓN:
"En la zona superior del suelo por encima del nivel del
agua, las paredes aparecen en la poca profundidad que oscila entre 1,5 a 2,5
metros. Estas estructuras de adobe deterioradas son muy caótica y no muestran
ninguna estructura de la red consistente y puede ser cómodamente relacionadas
con el período histórico de la época ptolemaica y romana. Un período en el que
se sabe que la zona del laberinto fue utilizado como un cementerio, y
probablemente también cambió a vivienda en la época bizantina. " (…){2}
(…) "Al norte de la pirámide un enorme cementerio está
situado, reconocible por las construcciones de adobe, tumbas, envolturas de
momias y huesos. En el norte en la
esquina este del lugar se puede definir un área con posos y tumbas, que
funcionaron como cementerio para entierros humanos y cocodrilos," {3}.
Es escaneado el laberinto perdido de Egipto
DESCRIPCIÓN DEL LABERINTO
“ — Este es, seguramente el célebre Laberinto del Lago Merik
que hizo construir el Faraón Amenemhat III para salvar las vidas de los suyos y
sus incalculables riquezas en caso de producirse las invasiones extranjeras a
sangre y fuego que sufrió el viejo Egipto en diversas ocasiones — y debía estar
en lo cierto, pues encontraban salas amuebladas, alcobas, cocinas, salas de baño,
patios de juego, establos, caballerizas, pesebres, salas de armas, toda una
ciudad subterránea con sus claraboyas para el aire y la luz, tan hábilmente
disimuladas al exterior por un tronco de árbol ahuecarlo o una roca horadada
que nadie podía sospechar que aquello fue intencionalmente colocado. Y Zebeo
fue de opinión que aquel descubrimiento debían mantenerlo secreto entre los
treinta y tres de la asamblea de las piedrecillas blancas y negras que habían
formado una fuerte alianza para enseñar a los hombres a vivir la vida de
acuerdo con la sabia enseñanza del Cristo Hijo de Dios.”{4}
(...)“Mientras ocurría todo esto en el puerto de Alejandría
despidiendo al viajero hacia Palestina, tres de los ex-cautivos del viejo
Castillo habían llenado bolsos de provisiones y cantarillos de agua y se habían
aventurado por los tortuosos corredores de lo que ellos llamaban la ciudad
subterránea recientemente descubierta.
Dionisio de Caria había
sido el iniciador del arriesgado viaje.
— De todos modos — decía a sus compañeros — no tenemos nada que
perder, ni hay tampoco nadie que nos llore si morimos. Me urge saber dónde
termina este endiablado camino bajo tierra.
Encontraron en varias encrucijadas que formaban plazoletas,
pozos de agua dulce que podía sacarse con unos cubos de madera mediante una
hábil combinación de poleas sostenidas por fuertes caballetes de madera y
piedra.
Llevaron la cuenta de que durmieron cinco noches y caminaron
cinco días sin encontrar salida al exterior y solo dándose cuenta del día y de
la noche por la luz que entraba a través de luceras y claraboyas. Caminaban solamente
por el túnel central, sin atreverse a distraer tiempo y fuerzas en registrar
los caminos travesaños que eran innumerables A la tarde del sexto día vieron
frente a ellos un disco luminoso por donde penetraba la dorada luz como un velo
de oro.
— ¡Por fin!... ¡Por fin!... — exclamaron los tres al mismo
tiempo. Llegados al disco de luz, vieron que daba sobre un hermoso lago, y esta
salida estaba hábilmente disimulada entre dos salientes de la roca negra y lustrosa
de uno enormes peñascos donde crecían pinos, encinas enanas y viñas,
silvestres.
Extranjeros en esta tierra, los tres
exploradores ignoraban en qué sitio veían de nuevo la naturaleza viva que les
brindaba sus encantos. Pero tú y yo lector amigo podemos saber que habían
llegado al Oasis de Baharíte a la margen oriental de su hermoso lago, en cuya
ribera norte se encontraba la cabaña de piedra donde años atrás Agades y Matheo
contemplaban reflejarse las estrellas como planchuelas de oro en sus aguas
límpidas y serenas.”{5}
COMPROBACIÓN DE HERODOTO
“La descripción que hace Herodoto del Laberinto es la
siguiente: "(Unos reyes de Egipto) decidieron también dejar en común un
monumento conmemorativo suyo, una vez tomada esa decisión, ordenaron la
construcción de un laberinto, que se halla algo al sur del lago Meris,
aproximadamente a la altura de la ciudad que se llama Cocodrilópolis: (...). Ya
las pirámides eran, sin duda, superiores a toda ponderación y cada una de ellas
equiparable a muchas y aun grandes obras, pero la verdad es que el laberinto
supera, incluso, a las pirámides. Tiene doce patios cubiertos, seis de ellos
orientados hacia el norte y los otros seis hacia el sur, todos contiguos, cuyas
puertas se abren unas frente a otras, y rodeados por un mismo muro exterior. Dentro
hay una doble serie de estancias -unas subterráneas y otras en un primer piso
sobre las anteriores-, en número de tres mil; mil quinientas en cada nivel.
Pues bien, nosotros personalmente pudimos ver y recorrer las estancias del
primer piso y de ellas hablamos por nuestras propias observaciones; de las
subterráneas, en cambio, tuvimos que informarnos verbalmente, pues los egipcios
encargados de ellas no quisieron enseñárnoslas bajo ningún concepto, aduciendo
que allí se encontraban las tumbas de los reyes que ordenaron el inicio de las
obras y las de los cocodrilos sagrados. (...) (Las salas de arriba) despertaban
un desmedido asombro mientras se pasaba de un patio a las estancias, de las
estancias a los pórticos, de los pórticos a otras salas y de las estancias a
otros patios. El techo de todas esas construcciones es de piedra, al igual que
las paredes; éstas, por su parte, están llenas de figuras esculpidas y cada
patio se halla rodeado de columnas de piedra blanca perfectamente ensamblada.
Contigua al chaflán en que acaba el laberinto se encuentra una pirámide de
cuarenta brazas, en la que aparecen esculpidas figuras de grandes dimensiones;
y hasta ella hay un camino subterráneo." {6}
COMPROBACIÓN:
“El Mataha - expedición de investigación geofísica confirma
la presencia de elementos arqueológicos en la zona sur del laberinto de Hawara
pirámide de Amenemhet III. Estas estructuras cubren un área subterránea de varias
hectáreas, tienen una seña prominente de paredes verticales en los resultados
geofísicos. Las paredes verticales con un espesor medio de varios metros, se
conectan para dar forma a las habitaciones casi cerradas, que son interpretadas
como enormes en números.”
En consecuencia, el estudio geofísico iniciado con el permiso del Dr. Zahi Hawass el presidente del Consejo Supremo de Antigüedades, y llevado a cabo por el Instituto Nacional de Investigación de Astronomía y Geofísica (Helwan,Cairo) con el apoyo de Ghent University, ahora puede comprobar oficialmente la aparición de grandes partes del laberinto descrito por los autores clásicos en el área de estudio. Los datos del Laberinto se adquirieron principalmente de 2 superficies escaneadas en la zona al sur del laberinto de la pirámide.Un mapeo de exploración de 150m por 100m en el sitio correcto del canal de Bahr Wahbi , y uno en el sitio izquierdo (80m por 100m).
(...) La ubicación histórica del laberinto descrito por los autores antiguos siempre se ha situado cómodamente por la mayoría de los egiptólogos en Hawara, Egipto. Hay varias razones para esto. Al igual que la presencia descrita por Herodoto de la pirámide al lado del canal de agua a la entrada de un lago cercano, llamado lago Meris y la ciudad Medinet el-Fayum, que también se conoce como Crocodilopolis, la antigua ciudad de Arsinoe. Razones que fueron más tarde el apoyo de la investigación arqueológica de Flinders Petrie, quien afirmó que el laberinto cubre en Hawara una superficie de unos 244 metros de este a oeste por 304 metros de norte a sur.
Hawara está situado 90 kilómetros al sur de El Cairo moderno, a la entrada de la depresión del oasis de Fayum. {7}
Notas:
1. Cumbres y Llanuras Tomo I. Capitulo Diez Años de Labor
2. http://www.labyrinthofegypt.com/result.html
4. Cumbres y Llanuras Tomo I. Capítulo Diez Años de Labor
5. Cumbres y Llanuras Tomo I. Capítulo La Ciudad Subterránea